Termino una de mis clases y no puedo dejar de sentir esa sensación en el alma, una mezcla de dolor, tristeza, incertidumbre, confusión…Y estoy escribiendo porque mis palabras son mi medicina, cuando salen por mis dedos mientras tipeo….pero provienen de mi corazón, no de mi mente. Uno de los temas que estoy trabajando es el dar incondicionalmente, vairagya, dar sin esperar nada, dar siendo real… con amor, por el amor a la vida, no por lo que voy a recibir o pensando como afectara al otro, tanto para bien o para mal…solo dar fluyendo. Estando atenta a mi interior, a lo que yo siento mientras explico una postura o comparto alguna herramienta durante la clase, atenta a lo que siento cuando doy: ¿ hay algún deseo en mi dar? ¿espero que al otro le sirva? ¿no espero nada? muchas preguntas que están apareciendo y ayudándo a observarme en relación al otro.
Abro el espacio muy temprano , preparo el shala, me preparo para recibir a mis compañeros de practicas, y empiezan a llegar cada uno con su historia y su proceso personal, cada ser abre una nueva dimensión en el shala, y se me aparecen nuevas oportunidades para experimentar y disfrutar, y transpirar, y probar de nuevo, y equivocarme y todas esas cosas…sintiendo una base solida que es el amor por mi trabajo.
Y mientras trabajo empiezo a sentirme , a observarme… mientras observo a los practicantes, y confieso que el desapego es una de mis practicas continuas, ya que siento mucho amor y dedicación por el trabajo y cuando alguien percibo que rechaza mi dar o no lo valora o respeta el trabajo ,algo adentro mío se moviliza , ese aspecto vulnerable que se siente rechazado, excluido, se hace presente …una nueva oportunidad!! el otro me espeja el rechazo y allá voy para adentro a bucear en mis profundidades para poder sanarlas y reordenar creencias que me están limitando.
¿Y cual es el punto de equilibrio entre el desapego y poner limites a las faltas de amor? ¿ tenemos que permitir las faltas de amor y respeto por el desapego a lo que el otro piensa o siente? Hoy siento que hay diferentes momentos en estos procesos y la verdad se planta y habla profundo, hoy siento que el rechazo y la desvalorización ya no son parte de un sistema de relaciones saludable y amoroso, y es necesario poner un limite a esa energía atendiendo la verdad y el sentir interno. Hoy siento que no quiero practicantes que entren a practicar no queriendo hacerlo, hoy siento que no quiero que el espacio de practica sea tomado por el rechazo y la falta de amor, eso ya no me vibra. El amor y respeto a mi trabajo es básico en las practicas, y tener presente lo sagrado de esta practica mucho mas.
Si quiero practicantes que a pesar de todas sus historias y momentos esten dispuestos a transformarse, a querer tomar la medicina que la practica nos da, a evolucionar, a confiar en la practica y a confiar en mi y en ellos mismos , a aceptar cada momento y emoción presente, claro que si, pero con esperanzas de bienestar….sino…¿para que venis a practicar? ¿ para seguir donde estas? ¿ para sentirte peor de lo que viniste? ¿ para hacer sentir mal a los que te rodean? Es un momento en que tenemos que tomar las riendas de nuestras vidas y dejar de perder el tiempo en creencias mentales, es tiempo de cambio, de evolución. Quiero practicantes dispuestos al cambio, a la evolución, a que evolucionemos todos juntos desde la luz y el amor.
Desapego hasta en lo que acabo de escribir, pero mucha confianza en lo que me hace sentir después de ser sincera con mi momento presente, valorarme, cuidarme y elegir lo que me hace bien y dejar de recibir lo que no suma sino que empieza a restar. Por ahí mientras lees te acordas de alguien y te sirve para repensar-resentir esa relación. Se me viene la frase » el cliente siempre tiene la razón» que escuche y sigo escuchando desde mi infancia, hoy esa frase caduco en mi sistema de creencias, siento algo mas de empoderamiento, de valoración a mi misma, a la vida misma, de respeto e igualdad entre todos los seres, mas allá del rol en el que nos toque estar.
Gracias Vida, a veces tu potencia , tu inmensa luz da miedo pero mas miedo da la oscuridad….hoy elijo Vida!
Maria Noel Granados 