La primera vez que me dijeron que haga fuerza con mi cuerpo me sentí rarísima, no tenía ni idea de como generar fuerza y menos de sentirla.
Temblaba, contraía la mandíbula, apretaba las manos, hacia gruñidos, todas nuevas sensaciones que me hicieron dar cuenta de lo poco explorado que era el terreno de la fuerza en mi sistema corporal.
Me hacia sentir algo parecido a estar enojada, o a esas oleadas de ira que suelen pasarnos, pero la diferencia era que no estaba el condimento emocional, era algo puntual , un ejercicio que practicaba.
Me di cuenta de que no sabía la fuerza que tenía y como se sentía en mi cuerpo, sentía poder, presencia, mucha intensidad de energía…me asombré de mi misma.
Con el tiempo y el estudio científico de la fuerza, descubrí que esta activación de la fuerza corporal a través de las fibras musculares esta estrechamente realacionada con la activación de neuronas en el cerebro ( neurotrofinas ) y con la generación de la hormona del crecimiento ( somatotropina).
Los ejercicios de fuerza nos ayudan a nivel mental, nos abren a la posibilidad de nuevas sinapsis y por ende la activación de la neuroplasticidad cerebral. Movernos no es solo para el cuerpo, lo es para la mente y por consecuencia nuestros estados anímicos y emocionales.
La neurotrofina es una hormona segregada por el cerebro que aumenta la producción de nuevas neuronas .
La somatotropina es una hormona que renueva tejidos, cambia grasa por músculo, nos da mas efeciencia corporal, aumenta el metabolismo y retarda los efectos naturales del envejecimiento.
Para concluir : los ejercicios de fuerza tienen un beneficio neurológico, ya que la fuerza requiere de la activación de músculos a través de redes neuronales para poder reclutar las fibras musculares necesarias para esa fuerza, y asi el cerebro libera somatotropina y neurotrofinas.
Espero te haya servido esta información y te ejercites pensando en tu calidad de vida, tanto física como mental.
Hasta la proxima.
Noe